Yakutsk
tiene 300.000 habitantes y la temperatura en invierno es de al menos -34º
Centígrados
El
fotógrafo neozelandés, Amos Chapple, documentó la vida cotidiana en unas de las
regiones más complicadas para sobrevivir en el mundo ante las bajas
temperaturas que duran todo el año.
Chapple se
aventuró por cinco semanas en el pueblo de Oimiakón, así como la ciudad de
Yakutsk, la más cercana y la capital de la República de Sajá en el noreste de
Rusia, con la idea de mostrar en imágenes cómo vivían sus pobladores.
Ambos
destinos estarán siempre unidos, debido a que Yakutsk es la puerta de entrada a
Oimiakón, considerado como el pueblo habitado más frío del planeta.















0 comentarios:
Publicar un comentario